El Gobierno Nacional Indígena de México, es una organización política social que nace por la gran necesidad de organizarnos desde la comunidad, el municipio, el estado y nacionalmente para exigir el respeto a nuestros derechos y ser visibilizados e incluidos a participar activamente en los planes y proyectos de los gobiernos constitucionales en todo lo que tenga que ver con comunidades indígenas del País, para que cumplan con los acuerdos, convenios y los tratados internacionales, así como el de ser informados y que se nos consulten toda acción que se pretendan hacer en nuestros pueblos, bajo el pretexto que nos permitirá el desarrollo y bienestar, necesitamos que se consolide esa inclusión y que pronto podamos trabajar bajo la convivencia de lo constitucional y tradicional o usos y costumbres. Por mucho tiempo, hemos sido parte de diversas organizaciones lideradas por personas que no son indígenas, que no comparten nuestras culturas y nuestros valores humanos como indígenas, pero que usan la denominación de “indígena” para fines lucrativos o políticos ajenos a los nuestros. Nos han invitados a sus asambleas y con nuestras asistencias legitimábamos sus organizaciones en donde nos prometieron gestionar varias necesidades nuestras y nos prometieron ayudar, haciéndonos levantar listas y firmas, pero todo quedó en promesas, al final nos hacían quedar mal con nuestras comunidades.
En tiempos electorales nos daban paliativos y sin que las comunidades estuvieran de acuerdos nos hacían afiliar a algún partido u organización política, por eso, luego nos tachan de “pedilones”, de que nos contentamos con sus dádivas, y lo peor es que así hemos ido perdiendo poco a poco lo más preciado: nuestra palabra, identidad, hermandad, unidad, que son valores en nuestros usos y costumbres. En nuestras comunidades acabaron dividiéndose gracias a la acción de partidos políticos y grupos religiosos, que han separados a la comunidad, nuestra cultura y la familia a la que pertenecemos. Por esta razón se crea el Gobierno Nacional Indígena de México desde las comunidades originarias, con base en los derechos que tenemos vigentes en la Constitución del país y las Constituciones de los Estados, así como en diversas sentencias del Tribunal Interamericano de Derechos Humanos y tratados internacionales. Somos una organización apartidista, dispuesta al diálogo, con apertura a los demás, al conocimiento y a la tecnología. Defendemos nuestros territorios sin confrontarnos con otras organizaciones, lo hacemos con trabajo, inclusión y respetando los derechos humanos y las leyes que amparan el desarrollo de los pueblos originarios. La organización está integrada por líderes, artesanos, rezadores, parteras, médicos tradicionales, académicos indígenas, etc., personas dedicadas al rescate de la cultura, de nuestros usos y costumbres de todos los Estados de la República Mexicana. El Gobierno Nacional Indígena de México está consciente que todos somos hijos de México y que, por ello, todos somos hermanos. Trabajaremos en el campo que nos toque: llevando el alimento a la mesa de todos los mexicanos, mostrando nuestra cultura y arte en el país y fuera de él; también cuidando nuestra salud, aportando los conocimientos que tradicionalmente hemos conservados para el bien de todos. De esa forma reivindicamos la participación y el nombre de los indígenas en el país de todos: México.
Tiene su fundamento en la cultura primigenia en los VALORES de los pueblos originarios, basados en los usos y costumbres, como:
La palabra, Solidaridad, Compañerismo, Lealtad, Transparencia
La Administración, Voluntad
Responsable de su Territorio y medio ambiente. Donde se desarrollan practicas equitativas hacia la auto sostenibilidad y el ejercicio pleno de la ciudadanía.A través de los esfuerzos y voluntad de este grupo social cualificadas e implicadas, promueven el desarrollo económico, sociocultural de manera integral; basados en los derechos humanos y el cuidado para la seguridad y empoderamiento de los pueblos originarios, así como, en lo económico, social, cultural y ambiental; movidas y orientadas estratégicamente hacia la realización de “la nueva unidad de los pueblos originarios”